Mueren durmiendo y mueren despiertos.
Mueren en busca de comida y por falta de ella.
El espectáculo dantesco de Gaza debería atormentarnos y no lo hace.
Los que mandan están tardando en tomar medidas de verdad.
Que nadie vuelva a hablar de humanidad hasta que se haya detenido la matanza y se haya pedido perdón.
Asco y vergüenza.
Hay silencios incómodos, los espectadores callamos ante las imágenes que chillan aunque el sonido esté apagado.
Cambiar de canal para no ver los ojos que de tan grandes se comen la pantalla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario