domingo, 24 de agosto de 2014

alfredo



“Lo mío siempre ha sido tarea de equipo”
De tarde a mañana, eso tardó en llegar el libro a casa después de pedirlo vía Internet. Viva la inmediatez. Acababa de fallecer el protagonista y escritor del volumen. Alfredo Di Stefano. Si hay algo que resuma su personalidad es su falta de vanidad, o su callada humildad. Alejado del estereotipo del futbolista mediático de hoy en día el protagonista transmite deliciosamente sus origenes en Buenos Aires y la primera parte del libro se deja querer. La segunda es más futbolística, experiencias de jugador y entrenador, y de retiro siempre alrededor de la bola, y mas tediosa, pero siempre hay perlas para la reflexión, como aquellas ordenes de Santiago Bernabéu, presidente de otros tiempos, de no dejar comprarse un coche a los jugadores porque había que demostrar que los jugadores “eran de la misma causa que la gente”. Que lejos del hoy. Dicen que el fútbol era diferente entonces. Ahí tienen una muestra. O como el hecho de que la Quinta del Buitre que Di Stefano elevó al primer equipo naciera de la política de ahorro del club. Repito, cuan lejos de hoy, o comparen como celebran los penaltis transformados los figuras de hoy en día y cómo los celebraba Don Alfredo, sin celebrarlos, la ventaja era demasiado grande, decía. También es suya esa primera frase, quizás se resuma todo ahí, tuvo equipo, hizo equipo, llevó al club blanco a lo mas grande, sin palabras altisonantes, sin poses, sin casi micrófonos. Eran otros tiempos, siguen diciendo, mejores por lo menos en lo que al fútbol se refiere.

Gracias vieja. Alfredo Di Stefano (2000)

No hay comentarios: