Nueva
vuelta de tuerca de Roth al eterno problema judío, y a la relación de éstos con
los gentiles, con su desconfianza mutua; a las relaciones de padres e hijos y
su mutua incomprensión, a las relaciones de pareja, a la religión como
adormecedor de conciencias, y al sexo, que se convierte en el gran protagonista
de esta novela. Se suceden las situaciones que hacen sonreír, se sucede la
búsqueda de algo, se piensa sobre lo escrito y se acaba por leer con avidez
como todo lo que hasta ahora conozco del americano.
El
lamento de Portnoy (1969). Philip Roth
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