arco iris

Escoger a uno de los múltiples personajes que van apareciendo por la historia de Sudáfrica resulta difícil. El libro de Lapierre es ambicioso e intenta describir todo el periodo que va desde la llegada de los primeros europeos en el siglo 17 hasta las primeras elecciones donde el voto ya no fue patrimonio exclusivo de unos pocos, año 1994. Elecciones que auparon al poder a Nelson Mandela, referente de la lucha por la supresión de las barreras raciales. Fue Mandela quien dijo lo siguiente del personaje elegido: “Ningún blanco ha hecho más por Sudáfrica que Trevor Huddleston”. Este texto figura en la peana del busto de bronce dedicado a él en su ciudad natal, Bedford (Inglaterra). Sacerdote que pasó 13 años a mediados del pasado siglo en Johannesburgo, viviendo al lado de los desfavorecidos, concienciando a éstos de la necesidad de perseverar en la lucha contra la segregación y protestando por las condiciones impuestas por un gobierno que relegaba al pueblo de raza negra a la más absoluta marginación; valga como muestra lo que decía uno de los artífices de tamaña crueldad, Hendrick Verwoerd: ¿de qué serviría enseñar matemáticas a un niño negro si no está llamado a utilizarlas en la práctica? Sobran las palabras.

Una arco iris en la noche. Dominique Lapierre. 2008