viernes, 7 de noviembre de 2014

monument valley



Escenarios para que la diligencia de John Ford vuele, y otro John, Wayne, reparta tiros. Polvo del desierto y paisajes para la memoria. Tardes de domingo, o de sábado, cine y gritos, y aplausos, y sobresaltos, malos y buenos en un mundo dirigido de pantalla que ilumina ojos como platos y boca abierta, y yo sostengo la respiración. Es el mundo de la infancia, revivido años mas tarde en caballo de acero, en la soledad del paisaje, grande como para perderse pero pequeño y concentrado en neuronas que no olvidan. En el 2007.

No hay comentarios: