sábado, 24 de enero de 2009

320

320 pares de zapatillas había en la tienda y pareciera que no existiera ninguna. El niño que se acerca a la adolescencia no encuentra lo que busca y para el padre, la visión es aterradora, siendo como es, alguien que duda en sus compras y para quién la variedad en el vestir nunca fue algo imprescindible. Pareciera que la libertad para elegir, cuando las posibilidades son cercanas al infinito, generara una anulación de la voluntad de decisión. No pasaba lo mismo cuando el muestrario presentaba uno, quizás dos, no más de tres artículos. Ya, eran otros tiempos, por supuesto, tiempos donde la ilusión por alcanzar ese preciado bien parecía exponencial comparada con la que se vive hoy en día.

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